España pidió que se confíe en la suficiencia de las herramientas que la Eurozona está poniendo en marcha para resolver la crisis de la deuda soberana, especialmente la Facilidad Europea de Estabilidad Financiera (EFSF, en inglés).
Salgado pidió que "no se minusvalore" lo decidido el 21 de julio por los líderes europeos a fin de reforzar la capacidad de préstamo y la flexibilidad del fondo de rescate, e insistió en pedir un "margen de confianza" mientras los parlamentos nacionales completan la ratificación de los cambios.Mediante la EFSF se pretende construir "una barrera que aisle del contagio a los países que no son Grecia", proporcionando al fondo la capacidad legal para intervenir en los mercados secundarios de deuda, proporcionar dinero a los estados a fin de que puedan recapitalizar su sistema financiero, si fuera necesario, y aportar garantías a los préstamos del Banco Central Europeo.
Recordó que el último parlamento de la zona euro tiene previsto ratificar la legislación acordada el 14 de octubre.
Salgado también se declaró partidaria de adelantar la constitución del Fondo permanente de rescate acordado por los europeos.
La vicepresidenta insistió en que "España se está financiando bien", y que las emisiones de deuda pública española "están teniendo una cobertura importante, amplia, y ha sido así de manera recurrente durante todo el tiempo".