Los principales países emergentes o BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) mostraron hoy su "preocupación" por la grave crisis de la deuda soberana en la zona euro, pero evitaron abordar la idea de una ayuda financiera a esos países avanzados.
Los ministros de Finanzas y gobernadores de los bancos centrales de esos cinco países se reunieron hoy en Washington y alertaron sobre el impacto mundial que la crisis europea puede tener, si no se toman ya medidas decididas.
Los europeos "tienen que ser rápidos, osados y cooperativos entre ellos", para poner coto a la inestabilidad financiera, según declaró en rueda de prensa el ministro brasileño de Finanzas, Guido Mantega, tras la reunión.