Con la amenaza de una desaceleración económica en Estados Unidos pesando sobre su precio y presionado por la creciente inestabilidad política en Pakistán, el petróleo podría encaminarse a cerrar el año con su mejor ganancia anual en la década, encareciéndose tras la tensión palpada en 6 centavos y se negociaba a 96,06 dólares, frente a los 96 dólares de su cierre en Nueva York. Por su parte, el barril de crudo Brent, de referencia en Europa, para entrega en febrero cotizaba a 93,87 dólares en Londres, 1,2 dólares menos que al cierre de la sesión anterior.