El presidente venezolano, Hugo Chávez, restó importancia a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que habilitó a un carismático opositor a competir en los próximos comicios, y anunció que partía a Cuba para seguir con su tratamiento contra el cáncer.
La CIDH ordenó el viernes a Venezuela que permita participar en las elecciones al ex alcalde Leopoldo López que dijo irá a unas inéditas primarias que organizan los rivales de Chávez para las presidenciales del 2012.
El Gobierno dijo en la víspera que pasará el fallo al principal tribunal del país para que lo estudie según las leyes venezolanas pues, afirma, que es un tema que compete a la justicia local.
"Qué valor puede tener esa Corte, para mi no vale nada, cero a la izquierda, cero a la izquierda (...) un corte de cabello vale más que esa Corte, el corte de mi cabello vale más", dijo Chávez, que soltó risas y gesticuló para expresar el poco interés en la CIDH, durante un acto en el que recibió a su homólogo boliviano, Evo Morales.
Venezuela también calificó el pronunciamiento de la CIDH de "políticamente parcializado" y acusó al organismo internacional de extralimitarse en sus funciones.