Siete estados se unieron a una demanda del Departamento de Justicia de Estados Unidos para frenar la compra de T-Mobile USA por parte de AT&T, dijeron el viernes las autoridades del gobierno.
Fiscales generales de los estados de California, Illinois, Massachusetts, Nueva York, Ohio, Pensilvania y Washington se han adherido a la iniciativa para frenar la operación valuada en 39.000 millones de dólares (unos 28.200 millones de euros) que busca combinar la segunda y la cuarta operadoras nacionales de telefonía móvil más grandes.
El fiscal general de Nueva York Eric T. Schneiderman destacó en un comunicado que las ciudades de Nueva York, Buffalo, Rochester, Albany y Syracuse podrían tener una menor competencia en la provisión del servició inalámbrico.