La venta de bonos corporativos ha caído en Europa por primera vez desde 2002, ya que las compañías han decidido abandonar la práctica por los altos intereses. En concreto, las ventas cayeron un 3% este año respecto a 2006, y en el segundo trimestre las emisiones de bonos se redujeron a 285.000 millones de euros frente a los 616.000 millones de euros del primer semestre, según los datos recogidos por Bloomberg. Las empresas con ratings por debajo de investment grade (con calificaciones por debajo de BBB- para S&P, Baa3 para Moody´s o BBB (low) para DBRS), también conocidas como bonos basura, no han conseguido vender nada desde agosto, la mayor sequía en al menos nueve años. La prima que están exigiendo los inversores ahora mismo es más del doble de la que se estaba pidiendo este mismo mes de julio.