El Gobierno de EE.UU. urgió hoy a Pakistán a tomar medidas para evitar ataques como el perpetrado contra la embajada estadounidense y el cuartel general de la OTAN en Kabul, la capital afgana, que dejó 11 civiles muertos y fue obra de un comando talibán supuestamente con base en Pakistán.
"Una y otra vez hemos urgido a los paquistaníes a ejercer su influencia" para evitar ese tipo de ataques de clanes insurgentes como el de Haqqani, pero "hemos visto muy pocos progresos", dijo el Secretario estadounidense de Defensa, Leon Panetta, a los periodistas que volaron hoy con él a San Francisco.
"El mensaje que (los paquistaníes) necesitan conocer es (que) vamos a hacer todo lo que podamos para defender a nuestras fuerzas" desplegadas en Afganistán, advirtió el jefe del Pentágono.