El escritor disidente chino Liao Yiwu, que habló en Estados Unidos por primera vez desde que huyó de su país, dijo el martes que su único delito fue resistirse al "lavado de cerebro".
Liao, que pasó cuatro años en la cárcel por escribir el poema "Masacre" sobre la matanza de la plaza Tiananmen de 1989, afirmó que la libertad personal en China sólo está reservada a aquellos que someten su libertad espiritual.
"En China, el mayor problema es el lavado de cerebro. Si no tienes tu memoria, o tu consciencia, todo es posible, pero tienes que olvidarte de tus historias personales", dijo en un encuentro del PEN, un grupo de escritores que defienden los derechos humanos.
Liao agregó que, si no hubiera intentado pensar de manera independiente, habría "vivido una vida muy buena en China".