El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, ha afirmado que, aunque el crecimiento económico se está ralentizando, no existen señales de una recesión mundial, por lo que los bancos centrales no tienen previsto llevar a cabo acciones coordinadas.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del grupo que engloba a los principales bancos centrales, Trichet, que ejerce como portavoz del grupo, recalcó que los bancos centrales están listos para inyectar liquidez cuando sea necesario, al mismo tiempo que añadió que no existen indicios de una deflación en las economías desarrolladas.
"No vemos en absoluto que esté a la orden del día una recesión, pero sí vemos una ralentización en comparación con lo que se ha observado recientemente", afirmó Trichet, quien agregó que también perciben que los "riesgos a la baja" en el grado de desaceleración de la economía global han aumentado últimamente.