La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, inauguró hoy junto a su antecesor, Luiz Inácio Lula da Silva, el IV Congreso del Partido de los Trabajadores (PT), y se comprometió a crear una comisión que investigue los crímenes ocurridos durante la última dictadura, que imperó entre 1964 y 1985.
"Vamos a crear la Comisión de la Verdad. No hay sobre eso la menor duda pues en derechos humanos seré bastante firme. Le debo eso a las generaciones pasadas, presentes y futuras", declaró Rousseff, quien durante el régimen militar estuvo dos años encarcelada y bajo torturas por sus vínculos con un grupo guerrillero.
La propuesta para la creación de ese grupo ya fue presentada al Congreso Nacional por el Gobierno de Rousseff y se tramita con cierta resistencia de partidos conservadores y de militares, sobre todo ya retirados.