El gran protagonista de la representación sudamericana en la tercera jornada del Abierto de Estados Unidos fue el tenista argentino Juan Martín del Potro, quien volvía por primera vez a las pistas de Flushing Meadows desde que hace dos años ganara el torneo ante Roger Federer.
El jugador de Tandil regresó por la puerta grande, tras una contundente victoria ante el italiano Filippo Volandri por 6-3, 6-1 y 6-1, en la que se mostró muy concentrado y sólido ante un rival muy inferior en este tipo de pistas.
"Lo empecé nervioso y me costó darle la vuelta hasta que poco a poco fui encontrando mi nivel para poder ganar que era lo importante. Ha sido muy fuerte volver a jugar este torneo porque tenía muchísimas ganas, verlo el año pasado por televisión fue muy duro", explicó a la conclusión del partido.