La primera autopista en el suroeste del Tíbet, de 37,8 kilómetros de longitud y cuatro carriles, que une la capital tibetana, Lhasa, y el aeropuerto de Gonggar, en la vecina prefectura de Shannan, fue inaugurada este fin de semana por el vicepresidente chino, Xi Jinping.
Xi viajó a Tibet para presidir la celebración del 60 aniversario de la "liberación pacífica" del Tibet.
Los turistas nacionales y los extranjeros que cuenten con permiso para viajar a Tibet podrán recorrer por la autopista la distancia que separa la capital del aeropuerto en 30 minutos, evitando los inconvenientes de las carreteras inundadas por el deshielo del verano.
Gratuita y con iluminación mediante paneles solares en las farolas, la vía rápida se construyó en dos años, 11 meses antes del plazo previsto, y se podrá circular por ella a 120 kilómetros por hora.