La Comisión Europea (CE) aprobó hoy de forma temporal una inyección de 13.100 millones de euros, por parte de Irlanda, a la sociedad resultante de la fusión del segundo banco del país, el Allied Irish Bank (AIB) y la entidad de préstamos EBS.
El Ejecutivo comunitario considera que el apoyo público es necesario para "incrementar los ratios de solvencia del banco, permitirle resistir las situaciones de presión y preservar la estabilidad de los mercados financieros irlandeses", explicó en un comunicado.
La CE tomará una decisión final sobre la recapitalización en base al nuevo plan de reestructuración de la entidad que ha prometido Dublín y que Bruselas espera recibir antes de fin de mes.