El mexicano Humberto Leal fue ejecutado hoy en Texas después de que el Tribunal Supremo de EEUU se negase a detener su muerte y al silencio del gobernador Rick Perry que pudo haber concedido una suspensión de 30 días.
Leal, de 38 años y originario de Monterrey, fue condenado a la pena capital en 1994 por la violación y asesinato de Adria Sauceda, de 16 años, en el condado de Bexar (Texas).
Sandra Babcock, que encabezaba la defensa de Leal, dijo que "EEUU no cumplió con su compromiso de hacer valer la ley y trágicamente el señor Leal sufrió las consecuencias".
