El presidente de Filipinas, Benigno Aquino, anunció que ha vendido el polémico Porsche que compró hace algunos meses, adquisición que la mitad de los filipinos desaprueban, informó hoy la prensa local.
El mandatario explicó que decidió poner en venta el lujoso automóvil porque la gente que lo custodiaba, el Grupo de Seguridad Presidencial, estaba corriendo un riesgo innecesario para protegerlo.
"Es el momento de permitir a otros que lo disfruten. Ahora espero que esta sea la última pregunta sobre el automóvil, que ya no me pertenece", añadió Aquino.