La pena capital quedó abolida hoy oficialmente en Illinois al entrar en vigencia la ley que conmutó además por prisión perpetua las sentencias de 15 condenados que estaban en el pabellón de la muerte, uno de ellos hispano.
Según lo informado, los condenados que se alojaban en el Centro Correccional Pontiac de máxima seguridad fueron distribuidos en otras prisiones del estado.
Entre ellos Teodoro Báez, de 33 años, sentenciado por un doble asesinato cometido en 1999 en el que las víctimas fueron descuartizadas con una espada samurái después de una disputa por drogas