El petróleo de Texas bajó hoy el 0,6% y cerró en 90,61 dólares por barril, de nuevo su nivel más bajo en más de cuatro meses, influido por los renovados temores a un descenso de la demanda de crudo tras conocerse que el gasto de los consumidores estadounidenses se estancó en mayo.
Al final de esta primera sesión de la semana en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del Petróleo Intermedio de Texas (WTI) para entrega en agosto -los de más próximo vencimiento- habían restado 55 centavos al precio de cierre del viernes, con lo que quedaron a su precio más bajo desde febrero.
La semana pasada el llamado "oro negro" acumuló un descenso del 1,98% después de que EEUU y la Agencia Internacional de Energía (AIE) anunciaran que van a poner en el mercado hasta 60 millones de barriles de petróleo de sus reservas en el transcurso de los próximos treinta días.
