El magnate ruso Vladimir Antonov ha reafirmado su interés en hacerse con un 30% del capital de la firma automovilística sueca Saab, propiedad de la entidad Swedish Automobile (antigua Spyker), que mantiene parada su producción desde el pasado 7 de junio.
Antonov mantiene de esta forma su intención de invertir alrededor de 30 millones de euros en la compañía con sede en Trollhattan, aunque esta operación está pendiente de la aprobación por parte del Banco Europeo de Inversiones.
"Todo lo que pedimos es poseer un 30%", explicó el magnate ruso, cuya inversión permitiría a la compañía escandinava asegurar la viabilidad de sus planes de futuro a corto plazo y se sumaría a la inyección económica de 45 millones de euros realizada por la china Pangda.
