El Ministerio de Asuntos Civiles chino calcula que este mes han muerto 175 personas y otras 86 continúan desaparecidas a consecuencia de las lluvias torrenciales, las cuales comenzaron el 3 de junio.
Solo en la provincia de Zhejiang hay más de 4.410.000 de afectados, según datos del Departamento de Control de Inundaciones provincial. Unas 8.400 casas se han venido abajo y hay muchas carreteras cerradas. Cerca de 241.000 hectáreas de cultivo están anegadas y 1.846 fábricas han cerrado sus puertas en la provincia, uno de los principales centros de producción del país. Asimismo, la inundación de la cuenca del río Qiantangjiang ha dejado un saldo de dos muertos y un desaparecido.