El ministro de Finanzas del último gobierno de Hosni Mubarak, Yusef Butros-Ghali, ha sido condenado a 30 años de prisión por malversación de fondos públicos, según informa el diario egipcio 'Al Ahram'.
Además, Butros-Ghali deberá restituir 30 millones de libras egipcias (unos 3,45 millones de euros) estafadas al erario público y una multa adicional de otros 30 millones.
Butros-Ghali fue destituido durante las protestas que pusieron fin al régimen de Mubarak, pero se encuentra en paradero desconocido y diversas fuentes indican que podría haber salido del país.
El egipcio fue el primer ministro de Finanzas de una gran potencia emergente en presidir el Comité Financiero del Fondo Monetario Internacional (IMFC), 2008.
Desde este puesto gestionó los rescates y préstamos a países como Hungría, Rumanía, Ucrania, Islandia, Grecia e Irlanda, pero finalmente dimitió de su cargo en febrero, durante las protestas contra Mubarak.