Caja Cantabria aprobará el próximo 30 de junio, en una asamblea extraordinaria convocada a las cinco de la tarde en el Casyc, la segregación de sus activos a favor de Effibank, el banco constituido junto a Cajastur y Caja Extremadura. En total, el patrimonio que segregará la entidad cántabra asciende a unos 405 millones de euros.
Según destaca la entidad en un comunicado, el banco es la fórmula que permitirá a Caja Cantabria "seguir ejerciendo su protagonismo en el desarrollo económico de la Comunidad, fortalecer su posición en el mercado y atender, dentro del nuevo contexto financiero español e internacional, a su clientela y a la proyección profesional de su plantilla, así como al mantenimiento de la Obra Social y su extensa influencia en la sociedad de Cantabria".
El valor de los activos de la entidad cántabra supera los 9.877 millones de euros, mientras su pasivo se eleva a 9.472 millones, con lo que el valor final del patrimonio que se va a segregar es de 405,1 millones.