La popularidad de la primera ministra australiana, la laborista Julia Gillard, cayó a los peores niveles desde que comenzó su gestión hace menos de un año, según la encuesta difundida hoy por el grupo Nielsen.
El sondeo indica que el índice de aprobación de Gillard se redujo a un 43 por ciento, mientras el respaldo del líder de la oposición, el conservador Tony Abbot, por primera vez fue superior con un 45 por ciento.
La encuesta también señala que la Coalición Liberal encabezada por Abbot tiene un 56 por ciento de la intención de voto del electorado, respecto al 44 por ciento del Partido Laborista en el poder.
Otro sondeo revelado hoy por la empresa Newspoll refleja que la popularidad de Gillard es ya de apenas el 34 por ciento, y el 55 por ciento de los ciudadanos desaprueba su gestión.
Esta cifra es inferior incluso al índice de aprobación que tenía su antecesor y actual ministro de Exteriores, Kevin Rudd, cuando éste fue desalojado del puesto por Gillard en junio del año pasado.
La semana pasada, el Gobierno australiano presentó su presupuesto para el año fiscal 2011-2012, en el que prevé un crecimiento económico del 4 por ciento y reducir el déficit a 22.600 millones de dólares australianos (24.430 millones de dólares ó 16.974 millones de euros).
Sin embargo, las cuentas públicas presentan muchos recortes en gasto social que no han gustado a una parte del electorado.
