La decisión del Gobierno de reducir de 120 a 110 kilómetros por hora la velocidad máxima en autopistas y autovías ha provocado un descenso del 7,9% en el consumo de carburantes en marzo, informó el ministro de Industria, Miguel Sebastián.
El consumo de marzo fue el menor en este mes desde 2003, a lo que contribuyó no solo el nuevo límite de velocidad sino también el elevado precio de los combustibles. Por tipo de producto, la demanda de gasolina registró una caída del 12,7%, la mayor desde septiembre de 2001, mientras que la de gasóleo cayó un 6,8%.
Según afirmó, estos resultados "llamativos" son "muy superiores a lo estimado" y, de consolidarse durante el ejercicio, recortarán el gasto del Gobierno en importaciones de petróleo de 1.150 millones de euros este año. En marzo, el ahorro fue de 94,2 millones.
