El grupo farmacéutico estadounidense obtuvo un beneficio neto de 1.055,9 millones de dólares en el primer trimestre de 2011, lo que supone un retroceso del 15,3% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, informó la empresa.
La multinacional farmacéutica precisó que sus resultados se vieron afectados por los mayores costes derivados de la reforma sanitaria en EEUU, la competencia de medicamentos genéricos, así como por las indemnizaciones por los recortes de plantilla anunciados y una carga de 388 millones de dólares relacionada con el desarrollo de medicamentos contra la diabetes con el laboratorio Boehringer Ingelheim.
La cifra de negocio de Eli Lilly alcanzó los 5.839 millones de dólares, un 6,4% más, impulsada por el crecimiento de las ventas a nivel internacional (+13%), mientras que en EEUU la facturación aumentó un 1%.