La tasa de inflación de China, cuyos altos niveles preocupan al Gobierno de la segunda economía mundial, se situó en el 5,4 por ciento en el pasado mes de marzo, medio punto porcentual más que en los meses de enero y febrero, informó hoy el Buró Nacional de Estadísticas en rueda de prensa.
En el cómputo de todo el trimestre, los precios en China han ascendido un 5 por ciento, todavía un punto por encima de los objetivos del Gobierno chino, que se ha fijado mantener la subida de precios por debajo del 4 por ciento para todo 2011 (el año pasado fue del 3,3 por ciento).
En términos trimestrales, se registró un alarmante aumento de los precios de los alimentos, de hasta el 11 por ciento, mientras que la vivienda, todavía en una burbuja especulativa pese a las medidas de "enfriamiento" de Pekín, subió sus precios un 6,5 por ciento.