La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) se niega a tratar nuevas subidas del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) porque no es el "momento oportuno" y porque puede provocar un "efecto arrastre" en los salarios que estén próximos a esta renta salarial. Según informaron a EFE fuentes de la patronal, la propuesta de elevar el SMI a los 800 euros en 2012, cuando se acaba de cerrar la de 2008 -de 570,6 euros al mes a 600-, es "prematura" y supone "correr demasiado". Según CEOE, ha de abrirse la mesa de diálogo social para debatir los futuros cambios para los próximos cuatro años.