Moody's Investors Service ha bajado la calificación de los bancos portugueses por la reducción del rating de Portugal y el perfil financiero de la mayoría de las entidades sin apoyos externos.
Moody's agregó que la rebaja de los bancos era de uno o dos escalones.
La reducida fortaleza financiera de los bancos aumenta la probabilidad de que el Gobierno portugués pueda limitar su apoyo futuro a esas entidades.