El fabricante automovilístico japonés Toyota negó hoy que vaya a suspender la producción en sus plantas norteamericanas por falta de componentes tras los devastadores terremoto y tsunami que sufrió Japón el mes pasado, aunque reconoció que probablemente se producirán "interrupciones".
A través de un comunicado Toyota señaló que "nada ha cambiado" desde que el pasado 23 de marzo dijera que había reiniciado el envío de componentes de Japón a Norteamérica y que contaba con el suficiente número de piezas almacenado como para mantener la producción y servicios.
El comunicado del fabricante japonés se produce tras surgir informaciones que señalaban que Toyota se vería obligada a suspender las operaciones en sus plantas norteamericanas ante la falta de componentes.