El Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que Bélgica se está recuperando de la crisis financiera y de la recesión global, pero advierte de que la ausencia de un nuevo gobierno federal, al no lograr alcanzar los partidos políticos un acuerdo tras las elecciones del 13 de junio de 2010, retrasa la adopción de medidas para hacer frente a los desafíos a largo plazo a los que se enfrente la economía belga.
En el informe emitido tras completar las conversaciones con las autoridadesdel país llevadas a cabo en el marco del Artículo IV, el FMI elogia los avances en materia de consolidación fiscal, que consiguieron reducir el déficit desde el 6,8% del PIB en 2009 al 4,6% en 2010, así como a la hora de recuperar la confianza en el sector financiero.
Además, subraya que la tasa de desempleo consiguió estabilizarse el pasado año y que la actividad económica se expandió más de lo previsto en 2010 (2%). De hecho, apunta que está previsto que continúe en esta línea en 2011, aunque de forma más moderada (1,7%), dada la ralentización del crecimiento esperada en general en la Eurozona.