El sistema financiero español necesitaría captar fondos adicionales por importe de 64.000 millones de euros para cumplir con un umbral mínimo de capital del 7%, en un hipotético escenario de extrema tensión dibujado por la agencia de calificación Standard & Poor's para analizar la resistencia de los países europeos a una severa recesión económica, combinada con un empeoramiento del acceso al crédito y un acusado incremento de los tipos de interés.
Bajo las premisas establecidas por S&P en este ejercicio, que la propia calificadora de riesgos se ha apresurado a subrayar que "no es la expectativa central, sino una simulación", el PIB de España sufriría una caída agregada entre 2011 y 2015 del 20%, la tasa de paro alcanzaría el 25%, mientras el desplome bursátil sumaría un 70% y el precio de la vivienda bajaría un 45%.
"Este hipotético escenario de estrés es deliberadamente más extremo que nuestro escenario base", precisó la responsable de crédito de S&P para la región EMEA (Europa, Oriente Próximo y Africa), Blaise Ganguin. "No pensamos que vaya a producirse un 'shock' sistémico de este calado", puntualizó.