El ministro de Fomento, José Blanco, destacó este sábado la colaboración institucional para intentar solucionar el colapso que se produjo en la A-6 la noche del viernes por la intensa nevada y afirmó que asume su responsabilidad como ministro.
"Cuando ocurre una cosa de estas siempre se mira la responsabilidad del Ministerio de Fomento. Asumo mi responsabilidad, pero insisto: todo el mundo puede hacer más ante este tipo de situaciones", aseveró antes de participar en un mitin en Las Rozas.
Blanco, que ha indicado que la previsión de nevadas estaba señalizada 24 horas antes en las carreteras de la región, ha apuntado que en este caso hubo "una situación sobrevenida, como ha sido una mayor intensidad de la nieve sobre la previsión que se tenía o el cruce de vehículos pesados que atraparon a las muchas máquinas quitanieves".
Después de insistir en que había 14 de estos vehículos para limpiar las carreteras, un número que ha considerado "suficiente para abordar desde la normalidad una situación como la que estaba diagnosticada", ha recalcado que tras lo vivido se queda con "lo positivo: la colaboración institucional, la cooperación, el civismo de los ciudadanos y el esfuerzo de cientos de personas para restablecer la situación, desde los que estaban atrapados, a la Guardia Civil de tráfico y a la gente de la Red de Conservación de Carreteras del Estado".
"Siempre se puede hacer mejor, todos lo podemos hacer mejor, siempre se pueden reforzar los mecanismos de prevención", ha reiterado, al tiempo que ha señalado que las previsiones sobre la intensidad de la nieve "eran inferiores" a lo que finalmente se produjo.
"Las máquinas quitanieves estaban dispuestas, sencillamente no pudieron realizar su trabajo. Desde luego, el Ministerio de Fomento no tenía la previsión de que se cruzaran en la autovía vehículos pesados que dificultaron que las máquinas quitanieves que estaban en el lugar pudieran realizar su trabajo".
Blanco afirmó que el gabinete se reforzó con la presencia de la secretaria general de Infraestructuras, Inmaculada Rodríguez Piñeiro, y del director general de Tráfico, Pere Navarro, a los que se sumó el director general de Protección Civil.