El operador energético galo sólo cubrirá uno de cada dos puestos de trabajo de los que van a desaparecer como consecuencia del plan de jubilación de 20.000 empleados. Por tanto, suprimirá 10.000 empleos de aquí a 2012. EDF, que tiene una plantilla de 156.000 trabajadores de los que 106.500 trabajan en Francia, pretende eliminar estos empleos de las áreas de producción nuclear y del departamento comercial. Asimismo, otros 22.000 empleados podrían dejar la empresa entre 2010 y 2015. El sindicato socialista GGT ya ha denunciado el "plan masivo" de supresión de empleos que la organización sindical CFDT ha calificado de "escándalo". En su proyecto industrial correspondiente al periodo 2005-2007, EDF prevé un ahorro en gastos de personal de 1.500 millones de euros.