
El PP limitará hasta "el mínimo indispensable" la convocatoria de nuevas plazas de empleo público con el fin de "redimensionar" las administraciones y ajustar sus plantillas en función, esencialmente, de la eficiencia.
Ésta es una de las medidas por las que apostará el PP tras las elecciones autonómicas y locales del próximo 22 de mayo, según el borrador del programa marco, cuyo contenido es aún provisional, aunque recoge los pilares sobre los que se levantará el ideario de los populares para esos comicios, y en gran medida, para las próximas elecciones generales.
A la espera de que las que direcciones del Partido Popular en cada comunidad autónoma haga las aportaciones que estime, la organización que lidera Mariano Rajoy tiene claro qué hacer en aquellas comunidades en las que gobierne.
Así lo exhibirá el próximo fin de semana en Palma de Mallorca, a donde acudirán la dirección nacional del partido y todos sus candidatos autonómicos para presentar el programa.
El borrador se divide en tres bloques, uno dedicado a políticas sociales que lleva por título "Lo primero, las personas"; otro dirigido a la economía, en el que el PP pone énfasis en la contención del gasto; y un último concebido para "redimensionar" las administraciones y modernizar su funcionamiento.
En éste es donde aparece la apuesta del PP por dejar en el "mínimo indispensable" la oferta de nuevas plazas de empleo público.
Lo hace, dice, porque, tras un análisis de los puestos de empleo público, conviene reajustar la plantilla de las administraciones de acuerdo con los criterios de "modernidad y eficiencia".
Hay muchas alusiones del PP a la necesidad de contener el gasto y de ganar en eficacia, y así, establecerá un marco de referencia para los salarios de los cargos políticos, de modo que se adapten al grado de sus responsabilidades.