La directora de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, reclamó este viernes desde Ciudad de México una mayor voluntad para que la sociedad y los gobiernos latinoamericanos atiendan la obesidad y otros males crónicos no transmisibles que aquejan a la región.
"Se requieren esfuerzos mayores de los gobiernos así como del sector público y la sociedad civil en general, pues la obesidad y otras enfermedades no se pueden combatir sin el trabajo conjunto y sin la decisión y voluntad de cada uno", argumentó la funcionaria.
Chan advirtió que mientras los ministros de Salud de la región no cuenten con el apoyo suficiente no se podrán combatir estas enfermedades.
"La labor de los ministros de Salud de la región en las medidas de prevención contra la obesidad o las enfermedades crónicas son loables. Sin embargo (...) solos y sin la ayuda de sus presidentes, primeros ministros y la sociedad no podrán avanzar mucho".
Acompañada por el mandatario mexicano, Felipe Calderón, la directora de la OMS consideró que el problema de la obesidad infantil, que afecta a millones de niños en América Latina, "no está provocada por padres malos, sino por políticas públicas malas".
"Son millones las personas que viven en ciudades donde cada vez hay menos espacios verdes, parques y zonas donde hacer ejercicio, lo que está empeorando el problema de la obesidad", aseveró.
La obesidad infantil ubica a México en el primer lugar mundial de este mal, admitió el presidente Calderón.
Explicó que en el país hay 4,5 millones de niños, de entre 5 y 11 años, que están excedidos de peso.
Ante la representante de la OMS y más de una treintena de ministros de salud de las Américas dijo además que las enfermedades del corazón y la diabetes son las dos primeras causas de mortalidad en México.
Identificó entre las causas de estas enfermedades a conductas no saludables, como la vida sedentaria, el tabaquismo, el alcoholismo y la mala alimentación.