La cúpula de Nissan en Japón ha decidido asignar a la fábrica de Barcelona la producción europea de la nueva camioneta pick-up y asegura la viabilidad de la factoría para los próximos años, según ha informado este martes a Europa Press la compañía.
Esta decisión cumple con las expectativas de la plantilla, después que la pasada semana en un referéndum accedió a aplicar más medidas de flexibilidad y contención salarial en el convenio para hacerse con la producción de este vehículo.
Sindicatos y Generalitat valoraron este gesto como un "ejercicio de responsabilidad" de la plantilla -formada por más de 3.000 trabajadores- para que Catalunya fabrique el modelo previsiblemente a partir de 2014.