Al menos dos personas murieron y 4.000 fueron evacuados de sus casas por las lluvias torrenciales que padece esta semana la región oriental de Filipinas, informaron hoy fuentes oficiales.
Una mujer de 80 años y su hijo de 50 perecieron ahogados ayer cuando intentaban alcanzar un refugio en la provincia de Albay, unos 350 kilómetros al sureste de Manila, señaló el gobernador, Joey Salceda.
Albay lleva ya seis días sufriendo precipitaciones sin cesar que ocurren fuera de la estación lluviosa (suele arrancar en junio y se prolonga hasta noviembre o diciembre en el archipiélago).