Varios palmos de nieve, placas de hielo y temperaturas de diez grados bajo cero sorprendieron la mañana de hoy a los habitantes de Seúl, quienes tuvieron problemas para llegar a sus puestos de trabajo por los grandes atascos.
Un gran número de carreteras amanecieron congeladas, al igual que el caudaloso río Han, que atraviesa la ciudad de Seúl y en el que flotan grandes placas de hielo tras la tormenta que azotó a la capital surcoreana la madrugada del lunes al martes y que dejó cerca de 10 centímetros de nieve.
Los servicios de emergencia se emplearon hoy a fondo para despejar las carreteras y las aceras, pero a pesar de ello, se registraron varios accidentes a causa del hielo, según la agencia local Yonhap.