El aeropuerto más grande de Moscú fue cerrado el domingo a causa de una avería en las líneas de alta tensión, en tanto que una tormenta de granizo causó estragos en el tráfico de la ciudad y dejó a los moscovitas deslizándose sobre el hielo.
El aeropuerto internacional de Domodedovo, por donde pasan cada día unos 55.000 viajeros, reportó un corte de energía total a las 08H00 (07H00 GMT). Una planta eléctrica de emergencia permitió al aeropuerto recibir los aviones que estaban acercándose para aterrizar, pero dos horas después todos los vuelos de llegada y salida fueron anulados, informó un portavoz al canal de televisión NTV.
Unas 16.000 personas quedaron varadas en el aeropuerto, sin informaciones inmediatas acerca de cuándo sería restablecida la corriente eléctrica.