El entrenador del Sevilla, Gregorio Manzano, reconoció que pasar a los dieciseisavos de final de la Liga Europa ante el Borussia Dortmund alemán "es una inyección de moral por todo lo alto".
"Teníamos un rival muy difícil, por sus números de la Liga alemana y en la competición europea. Se decía que era el mejor de Europa después del Barcelona", afirmó el técnico español, quien por ello destacó que "el partido era de una dimisión alta".
Manzano añadió que "el equipo ha tenido una fase de buen juego, en la que se le dio la vuelta al marcador, y otra segunda fase, después del empate a dos, que se sacó el otro fútbol, con casta y sufrimiento, lo que ha dado recompensa".