Las autoridades europeas están estudiando medidas para revisar el fondo de rescate de la eurozona de 440.000 millones de euros e incluir así la posibilidad de usarlo para comprar bonos de países en problemas, según una información del diario 'Financial Times'.
Según el rotativo británico, estas medidas facilitarían la ayuda a las economías más endeudadas sin tener que poner en marcha rescates propiamente dichos.
Actualmente sólo el Banco Central Europeo (BCE) ha utilizado la compra de bonos de países con dificultades financieras para rebajar sus costes de financiación.