Indo ha defendido los 294 despidos anunciados a principios de noviembre a través de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) como condición "indispensable" para garantizar la continuidad de los más de 400 puestos de trabajo que quedarán vinculados a la empresa.
"Entendemos y nos duele el sentimiento de frustración de los colaboradores afectados por el expediente, puesto que en las últimas ocasiones la compañía ha podido hacer frente a indemnizaciones más elevadas", ha asegurado la compañía.
Sin embargo, ha remarcado que la situación actual es de "extrema gravedad" y que no puede comprometer el futuro de la empresa y el de los colaboradores que quedarán vinculados haciendo frente a unas indemnizaciones superiores a las mínimas establecidas por la ley.