El ministro de Exteriores italiano, Franco Frattini, ha negado las alegaciones de diplomáticos estadounidenses en Roma sobre la dependencia de este país de Moscú en materia energética, según apuntan los cables de dicha embajada desvelados por Wikileaks.
"La independencia y seguridad energética corresponden a los intereses nacionales italianos. Nadie puede decidir por nosotros en este aspecto", ha declarado Frattini en un programa de televisión. "Nuestro camino es la diversificación (de fuentes de energía): primero Rusia, luego Libia, después Argelia y los países del Golfo. Italia decide sobre esto", ha recalcado el ministro.
La "extraordinariamente cercana" relación entre el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, fue tratada en los últimos documentos publicados por Wikileaks. El acuerdo entre el gigante energético ruso Gazprom y la italiana Eni sobre el gasoducto South Stream causó "intensas sospechas en Estados Unidos", según Wikileaks.