Un consorcio privado liderado por la empresa española Técnicas Reunidas pesentó ayer un plan a 20 años por 40.000 millones de dólares para transformar a Panamá en un centro de refinación de crudo y petroquímicos para América latina. El consorcio, denominado Energías, incluye inversores de Estados Unidos y Asia y planea construir refinerías, plantas petroquímicas y un oleoducto de 90 kilómetros que seguiría la ruta del canal interoceánico de Panamá. El proyecto deberá ser aprobado por el gobierno y superar una fuerte resistencia por razones ambientales. Compañías como BP, Total, Suez, Petrobras, Bechtel y el banco de inversiones UBS han mostrado interés en el proyecto, según ha comentado un portavoz de Energías.