La fiscalía especial serbia para crímenes de guerra ha presentado cargos formales contra nueve ciudadanos serbios presuntamente implicados en la masacre de más de 200 civiles albano-kosovares asesinados en 1999.
Los nueve acusados pertenecían a los Sakali, Chacales, un grupo paramilitar que perpetró crímenes de guerra en Kosovo durante el conflicto que desembocó en la intervención de la OTAN y la posterior secesión de esta provincia serbia de mayoría albanesa.
El pliego de cargos, elaborado en colaboración con la misión de la UE en Kosovo, EULEX, denuncia la "extrema brutalidad" con la que se emplearon los sospechosos en la matanza de la localidad de Cuska, recoge la emisora serbia B92.