Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea mantuvieron este sábado sus diferencias sobre la adhesión de Turquía, país con el que las negociaciones para su ingreso en el club comunitario avanzan con extrema lentitud desde que se lanzaron en 2005.
Así, durante el debate celebrado en el Consejo informal celebrado por los jefes de la diplomacia europea en el Palacio Egmont de Bruselas, se ha optado por hablar de reforzar las relaciones con Ankara, considerado un socio importante para los 27 en algunas zonas del planeta, como Bosnia, Irán o la región de Oriente Próximo.
"El debate no fue suficiente para hacer cambiar la posición de Francia respecto a Turquía", resumió el jefe de la diplomacia francesa, Bernard Kouchner. Mientras, su colega alemán, Guido Westerwelle, defendió construir la relación con Turquía fuera del marco de su condición de candidato.