La presidencia belga de la UE y representantes de la Eurocámara alcanzaron un principio de acuerdo sobre la reforma del sistema europeo de supervisión bancaria cuyo objetivo es evitar futuras crisis. La reforma creará un sistema de alerta que detecte riesgos para la economía y tres nuevas autoridades comunitarias de supervisión (bancaria, bursátil y de seguros) para mejorar la coordinación entre supervisores nacionales.
Ambas instituciones pretendían llegar a un pacto en primera lectura para votar el texto en el pleno de la Eurocámara que se celebrará entre el 20 y el 23 de septiembre en Estrasburgo y poder así cumplir el mandato de los jefes de Estado y de Gobierno, que exigieron que el nuevo sistema de supervisión esté en funcionamiento en 2011.
En opinión del comisario de Mercado Interior, Michel Barnier, se trata del marco "indispensable" para reforzar la estabilidad financiera y dotar a la UE de "mejores armas" para detectar riesgos futuros.
"A partir del 1 de enero de 2011 se pondrá en funcionamiento un sistema integrado de supervisión en la UE para prevenir riesgos sistémicos, fortalecer la solvencia y la seguridad de las instituciones financieras, proteger a las empresas y la ciudadanía y reaccionar ante las crisis", declaró por su parte el eurodiputado socialista y autor de uno de los informes del paquete de supervisión, Antolín Sánchez Presedo.