El Consejo de Seguridad de la ONU amplió hoy por un año más el mandato de la Fuerza Interina del organismo en el Líbano (FINUL), al tiempo que recordó la obligación de todas las partes de respetar la resolución 1.701 que puso fin a la guerra de 2006.
En una resolución adoptada por unanimidad, los quince miembros del máximo órgano de Naciones Unidas renovaron el mandato de los "cascos azules" en el sur del Líbano hasta el 31 de agosto de 2011 y los felicitaron por "crear una nueva atmósfera estratégica" en la volátil frontera con Israel.
Asimismo, instaron a respetar la integridad de la "línea azul", la demarcación entre los dos países trazada por la ONU, que el pasado 3 de agosto fue escenario de un enfrentamiento en el que murieron tres libaneses y un israelí.