La suspensión "indefinida" de operaciones de Mexicana de Aviación, una de las dos principales aerolíneas del país, empeora su situación financiera ya que en vez de darle un respiro acelera su sepultura, al cumplir 89 años en operación, coinciden analistas.
El consultor independiente del sector Simón García dijo a Efe que Mexicana de Aviación "difícilmente se recuperará de esta caída" ya que "arrastra otros problemas" como son una falta de planeación de negocios fortalecida a partir de su adquisición en 2005, que pasó del Gobierno a manos privadas.
Desde esta tarde Mexicana de Aviación, junto con sus subsidiarias Click y Linck, suspendieron sus vuelos nacionales y extranjeros, que incluían más de una treintena con destino a EE.UU., Centro, Suramérica y Europa.
Según la compañía esta medida obedece "al grave deterioro financiero en el que se encuentra" y "la imposibilidad" de lograr "una capitalización adecuada", según explicó ayer la empresa.