El fabricante holandés de coches deportivos Spyker, que este año adquirió Saab a General Motors, sufrió una pérdida neta de 139 millones de euros en el primer semestre de 2010, según anunció en un comunicado.
La compañía holandesa especificó que los resultados, que por vez primera incluyen a Saab, "reflejan el efecto de la financiación" del fabricante sueco y "las pérdidas operativas de la primera mitad de 2010, debidas en gran parte al relanzamiento de la producción de Saab".
El resultado neto de explotación (EBIT) arrojó una pérdida de 108 millones de euros, mientras que la facturación ascendió a 243 millones de euros.