La Comisión Europea propuso hoy dar nuevos poderes a los supervisores nacionales para que puedan vigilar mejor los conglomerados financieros -grandes entidades con actividad en la banca y los seguros en más de un país-. El objetivo es que cuenten con mejor y más temprana información sobre los posibles riesgos de estas entidades para poder intervenir y evitar futuras crisis.
Bruselas prevé que estos cambios entre en vigor en 2011, si bien la propuesta debe pasar aún por el Consejo y por el Parlamento Europeo.
En concreto, el Ejecutivo comunitario pide modificar la normativa europea para dotar de "nuevos poderes" a los supervisores naciones para "vigilar mejor" las entidades madre de los conglomerados, ya que considera que la estructura diversificada de estos grupos dificulta su seguimiento.